jueves, 28 de febrero de 2008

Experiencia de la parroquia Sagrada Familia CEVAS alegraron a niños y niñas en el verano

Comunicaciones - Obispado Chillán 27 - 02 - 2008

Durante el verano, muchos son los niños y niñas que por razones de falta de recursos económicos de sus familias no conocen lo que es viajar en tiempo de vacaciones. De ahí que en muchas parroquias y colegios de nuestra Iglesia Diocesana, tal como ocurre en otros lugares del país, se realicen los llamados CEVAS, Centros Vacacionales Sectoriales, que consisten en una semana de recreación para menores con vulnerabilidad social de sus barrios. Por lo general, se trata de una actividad que asumen los grupos juveniles de las parroquias y colegios, quienes además aprovechan este período para mostrar la figura de Jesús como un modelo para los niños y niñas, a través de la práctica de la oración y la formación didáctica. Asimismo, es una semana donde se les inculcan normas de buena conducta, se les enseña sobre el cuidado personal y la higiene y se les atiende con alimentación. Una bonita experiencia es la que realizó este año la parroquia Sagrada Familia de Chillán, donde un grupo de jóvenes de la comunidad atendió a un centenar de niños y niñas de las poblaciones aledañas, cuyas edades fluctuaban entre los 3 y 9 años. La actividad se inició el 21 de enero con un programa que contempló talleres de manualidades, teatro, pintura y también actividades de recreación. De acuerdo a lo contado por una de las coordinadoras juveniles, Elodia Martínez, no hay punto de comparación entre el mínimo sacrificio que para ellos significa la preparación y ejecución de esta semana de CEVAS, con todo el amor y la alegría que reciben por parte de los menores. “Nosotros aprendemos mucho de esta experiencia de vida pues en oportunidades nos quejamos de cosas sin importancia, pero el solo hecho de ver lo que viven estos niños y niñas nos hace valorar mucho más lo que tenemos. Por otra parte, está el cariño y las muestras de agradecimiento que a nosotros nos entregan. Nosotros lo llamamos el milagro de CEVAS, pues todo lo que recibimos en esta experiencia después se refleja en nuestras vidas y en el servicio que como jóvenes estamos entregando en medio de la comunidad parroquial”. La semana de CEVAS en la parroquia Sagrada Familia concluyó con una once infantil que tuvo como novedad la celebración de una fiesta de disfraces con todos los niños, niñas y tíos guías. Asimismo, ocurrió en varias de las parroquias urbanas y rurales de nuestra diócesis que año a año viven la realización de estos Centros Vacacionales Sectoriales

1 comentario:

Kelly dijo...

De todo corazón se les agradece a los jóvenes que nos acompañaron en Cevas, todos y cada uno de ellos esta recibiendo las gracias de parte de los niños cada día. Pues ellos los recuerdan y esperan volver a jugar y abrazar a sus tios.

Muchas gracias